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Thursday, January 04, 2007 |
Pero qué barbaridad... - Contrasentido - 04/01/07
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Pero qué barbaridad...
Hecho: El gobierno invirtió 2.5 millones de pesos del presupuesto nacional, del mismo que tú y yo engrosamos con los miles de impuestos que pagamos (dentro de poco nos van a cobrar hasta un impuesto a la respiración) para arreglarle el cabello a las mujeres.
Hecho: La opinión pública en general y algunos organismos de la Sociedad Civil como la Colectiva Mujer y Salud criticaron ácidamente este hecho, considerando que era una incongruencia y una falta de respeto a las mujeres.
Hecho: Luis Acosta -El Gallo-, director general de desarrollo comunitario (DGDC), salió al frente a dichas críticas, calificándolas de elitistas.
Hecho: Hasta el momento no se han dado cifras finales de a cuántas mujeres se les dió su "plancha" navideña.
Esta mañana, mientras me envolvía en la rutina de levantarme y desperezarme, al encender la televisión ví la defensa más descabellada (valga el término) y absurda que actividad alguna del gobierno haya podido tener. Era un spot de la DGCC donde mostraba a las mujeres aplaudiendo, gritando y -en general- manifestando agradecimiento por los "moños".
Lo interesante de este trago amargo era el sorbo del final: "los que lo tienen todo, se quejan, los que nada tienen, agradecen".
Entonces, partiendo de este postulado, ¿debe ser agradecido el que nada tiene cuando el pan viene con el precio de la primogenitura de Esaú? ¿Debo sentirme bien si me dan algo cuando se llevan mi dignidad? ¡Ay Balaguer... qué mal nos enseñaste a coger lo dao!
Hablando con dos compañeros de la redacción les decía que, después de haber visto lo geniales que son estos "comesolos" en poner impuestos a diestra y siniestra para usarlos en cualquier cosa menos en el bienestar de las mayorías, el último resquicio de duda u objetación al hecho fehaciente de que somos un estado fallido se me habia ahuyentado.
No hay dudas: son todos iguales, sean coloraos, moraos o blancos. Y lo peor es que vendrán con planchas de zinc, libras de arroz, pica pollo (y ahora tickets de salón de belleza) dentro de 1 año para que olvidemos.
Y lo más deprimente y pesimista de todo... ¡es que olvidamos!
Catarsis Catarsis.
"esta es mi verdad, y con mi vida la defiendo". |
Desde la Redacción,
Alexei Tellerias en fecha 11:12 AM
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